La estufa de secado es un equipo que se utiliza para secar y esterilizar recipientes de vidrio y metal en el laboratorio. Se identifica también con el nombre Horno de secado. Los fabricantes han desarrollado básicamente dos tipos de estufa: las que operan mediante convección natural y las que operan mediante convección forzada. Las estufas operan, por lo general, entre la temperatura ambiente y los 350 °C

¿Cuál es el propósito de la estufa?

La estufa de secado se emplea para esterilizar o secar el material de vidrio y metal utilizado en los exámenes o pruebas, que realiza el laboratorio y que proviene de la sección de lavado, donde se envía luego de ser usado en algún procedimiento. La esterilización que se efectúa en la estufa se denomina de calor seco y se realiza a 180 °C durante 2 horas; la cristalería, al ser calentada por aire a alta temperatura, absorbe la humedad y elimina la posibilidad de que se mantenga cualquier actividad biológica debido a las elevadas temperaturas y a los tiempos utilizados.

¿Cómo debes actuar ante un accidente común?

Si hay fallas en el equipo

Si hay rotura del material en el interior de la estufa

Si hay riesgo de temperatura elevada

Si se trabajara a altas temperaturas se deben utilizar los equipos de protección personal necesarios (por ejemplo guantes para riesgos por atas temperaturas).

Otros riesgos

Para prevenir estos riesgos se recomienda:

¿Qué requieres para operarla?

La operación de la estufa requiere tener en cuenta una serie de precauciones para su correcta operación. Entre las más importantes se encuentran las siguientes:

Sabiendo que estos equipos son uno de los elementos claves del laboratorio, en Kalstein ponemos a su disposición sofisticadas estufas de secado. Por eso le invitamos a echar un vistazo a uno de nuestros modelos disponibles AQUI