Es un dispositivo médico muy importante, cuando se trabaja con electrocirugía. Esta placa se comporta como un elemento neutro que recoge la energía y la devuelve a la unidad electroquirúrgica para cerrar el circuito, esto con el fin de evitar lesiones en la piel del paciente. Es decir, este equipo es una almohadilla que permite hacer tierra en el cuerpo para evitar quemaduras tras disipar la electricidad de manera uniforme.
Actualmente la electrocirugía es el procedimiento quirúrgico que más se emplea en las salas de quirófano. Ya que de manera común en todos los quirófanos del mundo hay un equipo de electrocirugía, son equipos muy versátiles y aplicables a todas las especialidades quirúrgicas, tanto en centros hospitalarios como en consultas médicas.