Las pipetas son dispositivos de precisión ideal para las necesidades de medición de líquidos en laboratorios de análisis clínicos y de control de calidad. Son instrumentos de laboratorio empleados para absorber y transferir pequeños volúmenes de líquidos.
Es de destacar en la actualidad, el uso de las micropipetas, versión más moderna de estas pipetas de laboratorio que permite emplear distintos líquidos sin tener que lavar el aparato: para ello, se emplean puntas desechables, de plástico, que habitualmente son estériles, y a su vez trabajan con microvolumnes, ósea volumnes muy pequeños.
Los volúmenes captables por estos instrumentos varían según el modelo y tipo de pipeta: los más habituales, denominados p20, p200 y p1000, admiten un máximo de 20, 200 y 1000 μl, respectivamente.